[Crítica] Agents of S.H.I.E.L.D. 3×20 – Emancipation

Agents of S.H.I.E.L.D.

A falta de menos de una semana para el final de temporada de Agents of S.H.I.E.L.D., hoy os traemos la reseña del capítulo emitido esta semana que sienta las bases para el gran espectáculo final.

Nuestros amigos de S.H.I.E.L.D. lo tienen difícil. Muy difícil. Hive está reuniendo un ejército de Inhumanos (como si él solo no fuera suficiente reto) para conquistar el planeta y convertirlo en un mundo de Inhumanos. Podría decirse que Hive es el Magneto de esta raza. ¿Y qué armas tienen nuestros héroes para salvar al mundo? De momento cero.

Pero ya sabemos cómo funciona esto. En algún momento se les ocurrirá algo y ganarán, dejando de por medio la muerte de uno de nuestros agentes. Mientras tanto, este capítulo nos ha devuelto a Daisy al equipo, libre de la infección de Hive y con ganas de venganza. Y es que para el enfrentamiento final harán falta tantos soldados como sea posible. El gran tanto que se ha anotado este capítulo ha sido la capacidad para continuar su trama y, además, tocar el arco central de Capitán América: Civil War.

El acta de Registro de Superhumanos se ha sentido en todo el capítulo con la presencia del General Talbot, la versión televisiva del General Ross. Incluso me atrevería a decir que la aproximación al tema del Acta ha sido más acertada en la serie que en la película. Pero, afortunadamente, el capítulo no solo se ha basado en contarnos lo que pasa en la película, sino que sigue con su agenda. Por ello vemos un nuevo intento de rescatar a Daisy del control de Hive, esta vez de forma satisfactoria para todos. Bueno, menos para Lash. Aunque no pondría la mano en el fuego porque Lash haya pasado a mejor vida…

Hablando de gente que pasa a mejor vida, sabemos que el próximo capítulo narrará la muerte de uno de nuestros agentes, y la mira ahora mismo está puesta en la frente de Mack. Ya nos lo adelantaba nuestro adivino particular de Espacio Marvelita, LordLinus, en los comentarios de otra reseña. Efectivamente, Elena/Yo-Yo le entrega su cruz a Mack, la misma cruz que luego flota junto al cadáver de un agente dentro de un Quinjet. Ahora bien, estas pistas son demasiado claras como para revelarlas un capítulo antes, con lo cual no podemos evitar preguntarnos si habrá algún giro final.

Sin embargo, aunque los acontecimientos han sido muy interesantes, la realización, una vez más, ha dejado mucho que desear. La primera parte del capítulo se alarga demasiado, las explicaciones a Talbot se hacen excesivas y bajan el ritmo, sobre todo de cara a poder contar decentemente el final del capítulo. Pero, tristemente, la acción del final a penas dura unos segundos y no satisface nada al espectador. Lash sigue siendo un muñeco que no sabe moverse. Todos sus gestos quedan sobrecargados y exagerados a más no poder, y la falta de ninguna escena espectacular hace que casi agradezcamos que la acción no dure más. Llegar al nivel de su compañera Daredevil es casi imposible, pero una mejora del nivel de la acción es más que necesario en esta serie.

Dicho esto, quedamos ya preparados para el doble capítulo final de la semana que viene donde veremos como se resuelven las tramas empezadas durante la temporada. Esperemos que la acción mejore para lo que promete que será una gran batalla entre el ejército de Inhumanos de Hive y los agentes de S.H.I.E.L.D. Pero también habrá que estar atentos a las pistas que nos dejan de cara a la próxima temporada.