El musical de Spiderman machacado por las críticas en U.S.A.

Supongo que más de uno tendrá curiosidad por saber qué han dicho los medios de la noche de apertura del archiconocido Spider-Man: Turn Off the Dark, el musical de Spiderman dirigido por Julie Taymor y con música de Bono y The Edge de U2. La verdad es que me temo que este espectáculo está condenado al fracaso, porque ya desde su concepción todo han sido problemas (de financiación, de abandono por parte del reparto, de accidentes, de legalidad, de agenda, etc.), y cuando por fin ha conseguido estrenarse, las críticas se han cebado con el musical, y ojo, porque aunque en general son todas en contra, hay algunas que son realmente crueles.

New York Times:

Dirigido por Julie Taymor, que además escribió el guión del espectáculo junto a Glen Berger, y con canciones de Bono y The Edge de U2, Spiderman no es solo el musical más caro de la historia de Broadway, sino que también podría clasificarse como uno de los peores.

New York Post:

Es emocionante y atroz a partes iguales… balanceándose constantemente entre lo impulsivo y lo malo. Las secuencias de vuelo pueden ser excitantes, como cuando Spiderman pasa por primera vez por encima de la orquesta, pero otras veces ni parece lo suficientemente bueno para un parque de atracciones, ya que los arneses hacen movimientos muy toscos.

The Hollywood Reporter:

Lo impactante de sentarse finalmente a valorar este capricho de 65 millones de dólares, es que el monumental anti-clímax en el que se convierte. Spiderman resulta caótico, sin brillo y un poco ridículo. Y no hay nada aquí que sea ni la mitad de pegadizo que la música de los dibujos de la ABC de 1967.

Gawker:

El guión es una parodia, la música es floja y mala, es como escuchar chatarra cayendo sobre el suelo después de que U2 grabasen Hold Me, Thrill Me, Kiss Me, Kill Me. Y a los actores, incluyendo al protagonista Reeve Carney, se les ve imprecisos y descuidados. Aunque todas las partes de vuelo y acrobacias funcionaran perfectamente, como ocurrió cuando lo vi, el espectáculo seguiría siendo una de las peores cosas, si no la peor, que he visto nunca en Broadway.

Los Angeles Times:

Esto es, después de todo, su visión, y es una visión que ha sido consentida por demasiadas fuentes, artísticas y financieras. Los inversores de Spiderman han financiado sin saberlo una forma artística de megalomanía. El guión, de Taymor y Glen Berger, es un absoluto fárrago, poniendo capas y subtramas antes de que se establezca la línea de la narración principal.